sábado, 29 de noviembre de 2008

Desierto


  • Sólo hizo falta un brindis por amor -le quiere y se ha ido- para que el color acre conquistara los reinos más cansados y sutiles de mi cuerpo. Y ahora este desierto detrás de mis talones.
  • Dicen que es un lugar indomable: no hay calles en su calle, no hay árboles ni parques, ni coches, ni aceras, no hay fuentes, no hay nubes, identidad ni tiempo. Pero esta tierra estéril se presta a las metáforas y a mi forma doliente de quererte. Por eso yo la habito.
  • El día aquí es furiosamente ardiente, las noches son metálicas navajas y, bajo el lamento de un sol penitente, el aire gime indecoroso y su quejido es el dolor de la carne. Por lo demás, la soledad aquí se suma en abstracciones. Por eso reino yo este desierto: a fuerza de erosión me erige como arena, viento u horizonte, y puedo ser en un extenso instante el baile que hace el sol hacia occidente y la lágrima que cae por un recuerdo.


martes, 25 de noviembre de 2008

Amaneciendo


Ardor

hado.
Encadenamiento fatal de los sucesos.
D. R. A. E.



yo te querría

(recuerdo la risa, el peinado, pinturas, zapatos, bolsillos, alcohol, el baile, la noche, el hielo, el tabaco, el humo, servicio, calor, espejos, tacones, canciones, bailamos, los sueños, palabras, brindamos, candor, el juego de estrellas, abrazos y pasos, pestañas, la ira y tu voz, los versos, los días, horarios, las prisas, cansancio, letargo, furor, la miel y los tenis, cordones, las manchas, almuerzos y cenas, dolor, mañanas, destierro, encierro la pena, castigo, camino, sudor, apuntes, vaqueros, carpeta, lecturas, dibujos, poemas, amor)

si se pararan
nuestras vidas a mirarse.

domingo, 23 de noviembre de 2008

Brindis

Febril como la carta de amor de un preso,
así estoy yo sin ti.
Joaquín Sabina




Brindis

Madruga la ira y se traduce

en unos labios que se alejan:

era ella o el ardor.



Ahora sólo queda ardor,

¿qué hago yo con todo esto?.

sábado, 22 de noviembre de 2008

Amigo

Un destino condujo diestramente
las horas, y brotó la compañía.
Gil de Biedma




Siempre vuelves, como una canción imperturbable que me duerme suave en la vida.

Llegas y te vas en la hora justa, y en la hora justa tu voz es desatada y el sueño es más libre y el deseo.

El resto se resuelve en ilusiones y son espejismos la profundidad del mar y tus abrazos.


Y siempre vuelves para sólo hablar de amor: oírte es tan sencillo que parece peligroso.




domingo, 16 de noviembre de 2008


Paseábamos por las calles de Málaga cuando nos encntramos con esto.
Seguro que fue un vaca muy digna.

jueves, 13 de noviembre de 2008




Si fueras un mito y lo supieras, si, aunque sólo para una sola persona en el mundo fueras un mito y lo supieras, y si supieras también que de un suspiro podría desvanecerse tanto falso pedestal, tanto equívoco ascenso a lo ilógico de los sueños, si supieras que de golpe podrían darte de espalda los aplausos de aquel o aquella que fuese tu muñequita indolente o tu trapito deshecho, si supieras todo esto y que el amor y el sexo pueden perjudicarte (es en los abrazos cuando más se arrugan las arrugas, cuando fallece el acero de los muslos, cuando caduca la voz) y si supieras que tendrías siempre que estar a la altura de las circunstancias y sostener así tu cuerpo equilibrado destronando a nubes y a aviones, si supieras todo eso y que al final dicen que todo cesa en su altura para tumbarse áspero en el suelo, y eso que dicen también de que los mitos son mitos hasta que dejes de serlo, querido, si lo supieras, dime, ¿cómo reaccionaría tu carne hilvanada en abstracciones, el musgo febril de tus encantos?

jueves, 6 de noviembre de 2008

Letras














Donde quiera que estés
te gustará saber
que te pude olvidar y no he querido,
que por fría que sea mi noche triste
no echo al fuego ni uno solo
de los besos que me diste.
Donde quiera que estés
Joan Manuel Serrat
porque creo en ti cada mañana
Luz Casal
(Me gustará echar de menos todo esto)

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Romanticismo



Mi madre es una mujer práctica.

Todos los noviembres abre un escape al romanticismo y, a pesar del microondas, hierve leche en una cacerola y se sienta a pensar en él. Mantiene un horario estricto: cada día piensa en él un poco menos y así, cuando diciembre asoma sus luces de colores, ella opina que ha recordado bastante y es hora de decorar el árbol y comprar los regalos.
Todos los noviembres nosotros bebemos leche caliente de cacerola y durante el resto del año echamos de menos su aroma.

Mi madre, sin comprender la causa, está viendo crecer a unos hijos muy románticos.

lunes, 3 de noviembre de 2008

Ancas de rana



sólo he dicho que soy una rana

me has visto nos hemos visto y hemos hecho el amor era de esperar quiero decir que podía suceder nos hemos visto hacer el amor no es la mejor fórmula aunque parece ser la única quizás el amor palabra inadecuada hacer el amor fabricarlo quizás alguien dijo ¿qué? y entonces otro dijo amor si no qué hicimos el sexo esa tampoco es la fórmula hicimos sexo suena a deber hicimos caricias hicimos desaliento desahogo necesidad quizás amor como eufemismo hicimos sublime diría otro hicimos pecado hicimos lo correcto lo vano lo único hicimos espiral mentira los dedos hicimos cuerpo hicimos flor flor es un eufemismo hicimos el tacto hicimos el juego el fuego sonrisa hicimos la broma de quemarnos juntos demasiado largo hicimos lo hicimos ¿lo? dijo alguno ¿qué? y otro dijo amor no es la mejor fórmula pero qué hicimos si no el amor como resumen como autopista al reino de los reinos hicimos ficción de ser otros hicimos olvido amor como olvido me gusta amor como locura amor y libertad hicimos el amor ahora suena tan bello quizás hicimos palabra incorrecta fuimos amor fuimos libertad

sólo he dicho que soy una rana no me pidas que diga croac pero mira mi piel no sé decirlo pero mira mi piel como si tuviera alas sé saltar

domingo, 2 de noviembre de 2008

un día como hoy

oigo los coches pasar
y en un día como hoy
(llueve, llueve, llueve)
me pregunto
¿por qué hablan los hombres?
¿por qué el mundo no aburre
sus esquinas en días como hoy?
es tan inexorable el paso del tiempo
que no soportamos
un día sin luz
sin estaciones
desde que te conozco
intento amar los días como hoy
soy como los charcos
o como el mar
todo puntos resueltos
a ser como las hojas
de un castaño
como una flor
los ojos bien abiertos
hacia el cielo



nunca como estos coches
que huyen
todos sabemos que huyen
porque los oigo correr
huyen porque sus piernas
no están hechas
para esperar
sus ruedas inexorables
inexorables
desde que te conozco
amo incluso esa palabra